Ximena Vergara
“Había tenido cinco años antes para apreciar el cine y ver que el montaje era mi vida, mi carrera”, responde Ximena Leyton en una entrevista realizada en 2013. Esos cinco años corresponden a su paso por el Instituto Fílmico, que se inició en 1965, cuando, luego de un viaje a Europa y sin ninguna experiencia en cine, Rafael C. Sánchez la invitó como aprendiz al Instituto Fílmico, enseñándole lo que era el cine, guión, argumento, el uso de la música, y también, la compaginación, un área en que se destacó tanto en el Instituto Fílmico, como en la Escuela de Artes de la Comunicación EAC, primero como alumna y luego como profesora. Como montajista, en la UC trabajó en varios cortos, entre ellos, Ventana al mundo (s/f) o El monumento sumergido (1975) de Rafael Sánchez; Tierra (1971) de René Kocher, Rutas para energía (s/f) de Filma Canales, o en el capítulo Por la Buena por la Mala (1976) dirigido por Hugo Miller para la serie de televisión Sentencia. Fuera de la universidad, también trabajó en colaboración con otra destacada montajista del cine chileno, Carmen Brito, en Crónica de una victoria (1971) de Sergio Riesenberg, y en Vías paralelas (1975) de Cristián Sánchez y Sergio Navarro.
Su carrera, sin embargo, no se limita al montaje, y se expande hacia la dirección. En el área de las co-producciones institucionales que se resguardan en la Colección del Instituto Fílmico, dirigió cortometrajes que forman parte de la serie Central Rapel (Obras civiles; Transformadores y patios; y Montajes de unidades generadoras) además de Rapel TV 4, material televisivo de la serie Rapel TV. También en televisión, co-dirigió junto a Graciela Bresciani Insectos para el programa educativo de 12 capítulos Andanzas de un chileno. Finalmente, dos obras en las que participó como directora y que se alejan en estilo de los anteriores son Búsqueda (s/f) realizada en el Instituto Fílmico; y la obra Chile Expo 1972 (1972) firmada colectivamente, en la EAC, por Eugenia Rodríguez-Peña, Guillermo Murúa, Juan José Ulriksen, María Teresa Diez, María Teresa Guzmán, Raúl Pacheco, René Kocher, y Ximena Leyton.
Insectos es un corto de 9 minutos, una co-dirección femenina que, como todos los materiales de Andanzas de un chileno muestra al tío Tilín, un personaje sabio que, en este caso cuenta al niño Panchito sobre la existencia de distintos tipos de insectos. Se trata de un corto que reproduce la preocupación por la educación, a través de los medios audiovisuales que se presentó en otros países de Latinoamérica, como es el caso de la Enciclopedia Popular del ICAIC (Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfica), conformada por casi 40 filmes realizados entre 1961 y 1964. Muestra también una forma de entender la televisión en la época: “la televisión era de cultura, educación, de divertimento, pero no farándula”, señaló Ximena Leyton en la entrevista antes mencionada.
En Insectos hay entonces una preocupación por el aprendizaje de los niños. Y el tema de la niñez, será la materia prima -junto al tema de la adolescencia y la juventud- de Búsqueda, un cortometraje de 8 minutos radicalmente distinto al anterior, en que René Kocher fue director de fotografía. Se trata de un corto de carácter experimental, con ecos de la Nouvelle Vague francesa, un movimiento que, como expresó Leyton “influyó mucho en los alumnos”, agregando también el interés que, en el contexto de la EAC, se dio por un cine “más bien pensante, no tanto de acción”.
Búsqueda responde a un cine de línea reflexiva, que en términos de estilo se desajusta notoriamente de las producciones del Instituto Fílmico, y se alinea más con las exploraciones formales que se realizarán posteriormente en la EAC. El corto, en este sentido, dialoga con el cine-ensayo, un género que tendría como eje “el acto mismo de pensar”, como expresa Gustavo Provitina en El cine-ensayo. La mirada que piensa, acotando que no se trataría de dar datos, estadísticas, o información “sino de la voluntad de pensar un tema y someter ese proceso a los procedimientos del lenguaje audiovisual” (p.100).
Con tono ensayístico, Búsqueda es un filme que se pregunta por la niñez, la adolescencia y la juventud en relación al mundo adulto, explorando las formas cinematográficas, con un minucioso trabajo de montaje visual y rítmico que va alternando imágenes de niños, niñas y jóvenes en primeros planos que juegan con la luminosidad y la fotogenia, con una rueda en movimiento de un parque de diversiones; con escenas escolares; y más adelante, con fragmentos de noticieros que aluden a un complejo mundo adulto atravesado por acontecimientos mundiales.
El cine-ensayo, comúnmente utiliza la voz en primera persona del director, pero aquí, tal vez con la herencia de su trabajo en documentales institucionales, Ximena Leyton entromete una voz en off masculina en tercera persona que hilvana las imágenes: “¿Y este mundo de los adultos es verdaderamente otro mundo? ¿No están ellos mismos condenados a llegar a viejos?”. Además, refiriéndose a la juventud en oposición al mundo adulto, la voz en off expresa que “Son temas diversos, son anhelos distintos, enfoques diferentes. Es esa diferencia de enfoque de vida la que les lleva a crear su propio mundo”. Como forma de graficar este mundo propio, Ximena Leyton intercala las melodías de una banda tributo a Los Beatles, y prosigue con un fotomontaje en tono collage que reúne imágenes aparentemente contradictorias entre sí: de The Rollings Stone, Ché Guevara, Violeta Parra, Marilyn Monroe, Elvis Presley, John Kennedy, entre otros.
Como quedó enunciado, en la propuesta experimental de Búsqueda hay, de todas formas, incrustados elementos del documental institucional, la voz en off en este caso, y esto sirve como entrada para presentar brevemente Chile Expo 1972 (1972), corto EAC de casi 7 minutos firmado por los 8 realizadores individualizados al inicio. El filme –encargado por la Corporación de Fomento de la Producción CORFO– registra los preparativos de la Exposición Nacional de Chile, realizada en 1972 en la Quinta Normal. Asimismo, su inauguración fue difundida en televisión, en Chile Expo spot en lo que pareciera ser la nota informativa de un noticiero.
Tal como ocurre con el documental por encargo, el corto hace uso de una voz en off masculina que reproduce las también clásicas ideas de progreso y modernidad, paseándose por los pabellones y aludiendo a las secciones: mar, industria, agro, bosque, geotermia, artesanía y folclor, entre otros. Sin embargo, la estructura formal del corto, es una propuesta de corte experimental que va escenificando la Exposición desde un punto de vista inusual: su construcción. En este sentido, más que exhibirse el espacio montado especialmente para la Expo, se muestra el proceso, que visibiliza, en la línea valórica de la Unidad Popular, la participación de los trabajadores. De esta forma, los obreros aparecen soldando, desplazando vigas, serruchando, martillando, y son presentados con recursos audiovisuales variados. El corto se inicia con sombras expresionistas, juega con los ángulos de los andamios, usa una cámara en mano que incluso gira en 360%, juega con el primerísimo primer plano y también, explora visualmente objetos como martillos o fierros.
La participación de Ximena Leyton en los dos cortometrajes referidos, sin duda, da cuenta de una búsqueda creativa que fue desarrollada tanto en el Instituto Fílmico como en la EAC. Permite también situarla en un panorama mayor: el del rol que tuvieron las mujeres en la época de los cines universitarios, en áreas tan diversas entre sí como la dirección, el montaje, el guion, o la dirección de fotografía.
